Un ganadero argentino enfrenta un juicio por presunta crueldad animal y daño ambiental tras destruir nidos de pingüinos de Magallanes en Punta Tombo, una de las mayores colonias de estas aves en el mundo. Ricardo La Regina, propietario de un terreno cercano a la reserva, es acusado de arrasar al menos 176 nidos con maquinaria pesada, dejando pichones muertos y adultos heridos. El tribunal de Rawson lo juzga por delitos que podrían suponer hasta cuatro años de prisión, en lo que las organizaciones ambientales califican como el primer juicio por ecocidio en el país.
La defensa de La Regina niega las acusaciones, argumentando que las obras, que incluyeron un camino de 900 metros y un alambrado electrificado, eran necesarias para su actividad ganadera y acusa al Estado de obstruir permisos de ecoturismo y proteger insuficientemente la zona. No obstante, el biólogo Pablo Borboroglu, testigo clave, describió la escena como devastadora, con nidos destruidos y un impacto irreparable para las aves. Un video presentado muestra un pingüino adulto intentando revivir a sus pichones sepultados.
Organizaciones como Greenpeace y la Asociación de Abogados Ambientalistas buscan sentar un precedente en este caso, destacando la gravedad del daño al ecosistema de Punta Tombo. El abogado Otto Axel Wöhler estima un perjuicio económico de medio millón de dólares por el impacto en el hábitat natural. La reserva, de 210 hectáreas, es clave en el ciclo reproductivo de los pingüinos, que regresan año tras año al mismo nido con la misma pareja.
El imputado justificó la construcción del alambrado para evitar que sus vacas invadieran propiedades vecinas en medio de una disputa familiar. “El Estado no ha actuado en diez años, y yo tuve que tomar medidas”, argumentó La Regina, admitiendo que enfrentaba dificultades económicas. La fiscalía rechazó una oferta de cesión de 300 hectáreas como alternativa al juicio, destacando el interés público del caso. Se espera un veredicto la próxima semana.
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